Recuperar una vivienda alquilada cuando el inquilino ha dejado de pagar puede convertirse en un proceso complicado, especialmente si en la propiedad residen menores de edad. Aunque la ley protege tanto a propietarios como a inquilinos, es fundamental conocer los procedimientos legales para llevar a cabo un desahucio de forma efectiva y sin vulnerar derechos.
¿Es posible desalojar a un inquilino con hijos?
La ley española permite el desahucio de un inquilino moroso, incluso si tiene hijos, siempre y cuando se cumplan los requisitos legales. No obstante, la presencia de menores en la vivienda puede derivar en la intervención de servicios sociales, retrasando el proceso en algunos casos.
El desahucio de inquilinos vulnerables puede suspenderse temporalmente si se demuestra que se encuentran en situación de riesgo. Sin embargo, esto no significa que el propietario pierda su derecho a recuperar la vivienda, sino que el proceso podría demorarse.
Pasos legales para desalojar a un inquilino moroso con hijos
1. Enviar un requerimiento de pago
Antes de iniciar cualquier acción legal, el propietario debe notificar formalmente al inquilino sobre la deuda mediante un burofax con certificación de contenido. En esta comunicación, se debe indicar el importe adeudado y conceder un plazo para su abono.
Si el inquilino paga la deuda dentro del plazo, el proceso de desahucio se detiene. Sin embargo, si no responde o se niega a pagar, se podrá iniciar una demanda judicial.
2. Presentar una demanda de desahucio
Si el inquilino no paga ni desaloja voluntariamente la vivienda, el siguiente paso es presentar una demanda de desahucio ante el juzgado de primera instancia correspondiente.
En la demanda, el propietario debe aportar pruebas como:
- Contrato de arrendamiento.
- Recibos impagados.
- Burofax enviado al inquilino.
- Cualquier otra comunicación relevante.
El juzgado notificará al inquilino la demanda y le concederá un plazo para responder. En caso de no hacerlo, se procederá con la orden de desalojo.

3. Procedimiento judicial y posible suspensión del desahucio
Cuando el inquilino presenta alegaciones o alega vulnerabilidad económica, el juzgado puede remitir el caso a los servicios sociales. En función de la situación del inquilino y de sus hijos, el desalojo podría suspenderse temporalmente:
- Hasta 2 meses si el arrendador es una persona física.
- Hasta 4 meses si el arrendador es una entidad jurídica.
Durante este tiempo, los servicios sociales deben buscar una solución habitacional alternativa para la familia afectada.
4. Ejecución del desahucio
Si no se produce el pago ni se alcanza un acuerdo, el juez emitirá una orden de lanzamiento que establece la fecha en la que el inquilino debe abandonar la vivienda. En caso de resistencia, la comitiva judicial podrá acudir con la fuerza pública para hacer efectivo el desalojo.
Consejos para evitar problemas legales en el desahucio
- Actuar con rapidez: Cuanto antes se inicie el proceso, menor será la deuda acumulada.
- Contratar a un abogado especializado: Un profesional del derecho inmobiliario puede agilizar el procedimiento y evitar errores legales.
- Negociar un acuerdo amistoso: En algunos casos, ofrecer una solución pactada (como un desalojo voluntario a cambio de condonar parte de la deuda) puede ser la opción más rápida y efectiva.
El desahucio de un inquilino moroso con hijos es un proceso legalmente viable, aunque puede implicar retrasos si se considera que la familia se encuentra en situación de vulnerabilidad. Para recuperar una vivienda alquilada de la manera más eficiente posible, es recomendable seguir los pasos legales adecuados y contar con el asesoramiento de un profesional.
Si te encuentras en esta situación y necesitas ayuda para iniciar un desahucio, consulta con un abogado especializado en derecho inmobiliario para garantizar que el proceso se realice correctamente y en el menor tiempo posible. asesoramos.
Con más de 20 años de experiencia en el sector inmobiliario, Jordi Rubio Palau, CEO de Finques Rubio y Alfa Badalona, es especialista en la compraventa y alquiler de propiedades en Santa Coloma de Gramenet, Badalona y Barcelona. Es Licenciado y Master en Administración y Dirección de Empresas, API y Administrador de Fincas colegiado y miembro de varias asociaciones inmobiliarias.